lunes, 11 de julio de 2011

bretones de Hispania

De origen celto-británico que se asentó en el noroeste de la Península Ibérica durante los siglos V y VI,dejaron tras de sí una importante huella en los folklores.
En aquellas partes del noroeste hispano dominadas por los bretones se implantó una forma de cristianismo céltico cuyas características eran similares al practicado en otros países del arco atlántico como Irlanda o Bretaña.

sábado, 9 de julio de 2011

Canes conquistadores


Los españoles utilizaron perros para la conquista del Nuevo Continente, siguiendo su propia tradición y la de numerosos pueblos como los asirios, babilonios, griegos, bárbaros y romanos,que aprovecharon las virtudes de los canes para el combate.

Los anales de la conquista nos describen a perros, comúnmente denominados Alanos, originarios de la península ibérica, empleados por los conquistadores para la invasión. Estos perros similares al actual Gran Danés procederían de la Rusia Oriental, pertenecientes a las hordas de alanos, un pueblo escita originario de Oriente que bajo la presión de los hunos invadió algunas provincias del Imperio Romano (Corintia) y que después, fusionándose con los pueblos invadidos y con los mismos hunos, llevó esta raza canina por toda Europa, hasta España, país en el cual existen testimonios de su existencia desde tiempos pretéritos.

La denominación de Alano se aplicó, en el Nuevo Mundo, de manera extensiva a todos los perros utilizados a fin de pelear ferozmente contra los indios. Aunque, en rigor de verdad, también actuaron dogos y lebreles. Los relatos de cronistas de la época cuentan de indios atacados por ¨perros enormes, con orejas cortadas, ojos de fiera de color amarillo inyectados en sangre, enormes bocas, lenguas colgantes y dientes en forma de cuchillos, salvajes como el demonio y manchados como los jaguares¨. La descripción también tiene un inevitable tono de admiración y temor; no olvidemos que en la época precolombina (antes del arribo de los conquistadores) los indios poseían perros de pequeña talla y cuerpo menudo.

jueves, 26 de mayo de 2011

Lejano Oeste


Los colonos anglos no pudieron sustraerse a la influencia de la lengua y cultura de los que les habían precedido en la colonización del Suroeste. En el siglo XVIII, la vida en el Suroeste tenía un sabor rural; se desarrollaba principalmente en pequeñas poblaciones, y en ranchos en los que la cría de ganado era vital. Por entonces, los españoles y mexicanos ya estaban familiarizados con la flora y fauna de la región y con las prácticas de los vaqueros que el cine mitificaría más adelante. Los recién llegados pronto aprendieron muchas de las palabras españolas características del medio y las adaptaron a las reglas fonéticas y morfológicas del inglés: canyon (de ‘cañón’), ‘mesa’, ‘sierra’, ‘arroyo’, ‘adobe’, ‘chaparral’, ‘saguaro’, ‘patio’, ‘hacienda’, ranch (de ‘rancho’), ‘sombrero’, ‘vaquero’, ‘rodeo’, ‘vigilante’, desperado (de ‘desesperado’), ‘burro’, ‘bronco’, y muchas otras pasaron a formar parte del vocabulario inglés. Los nombres de los estados y de muchas ciudades, pueblos, ríos y montañas son también españoles: las ciudades de El Paso, Amarillo, Santa Fe, San Diego, Los Ángeles, San Francisco, Palo Alto, los ríos Colorado, Brazos, Río Grande, las «Montañas Sandía» en Albuquerque, la «Sierra Nevada» en California, las «Montañas Sangre de Cristo» en Colorado y Nuevo México.
Los vaqueros de México denominaron a la técnica de laceo “dar la vuelta” , y los cowboys anglosajones la tradujeron literalmente como dallywelter.

viernes, 20 de mayo de 2011

Guido Fawkes


En las primeras horas del día 5 de noviembre de 1605, la víspera de la solemne Apertura de la Segunda Sesión del Primer Parlamento del reinado de Jacobo I, un soldado llamado Guy Fawkes (que luchó junto a los tercios españoles en Flandes junto con su primo Richard Collinge se unieron a Sir William Stanley, para combatir la religión protestante de los Paises Bajos, y firmaba como Guido Fawkes, nombre españolizado que adoptó), fue descubierto en los sótanos del Palacio de Westminster con un reloj de bolsillo, una linterna y fósforos, no lejos de una pila de leña y dos decenas de barriles de pólvora con los que pretendía hacer volar por los aires el Palacio al día siguiente, provocando la muerte, como el propio Rey señaló, “no sólo… de mi persona, o de mi esposa y posteridad (…), sino de todo el cuerpo del Estado
Se negó a denunciar a sus cómplices y fue ejecutado.

jueves, 28 de abril de 2011

Sierra Morena


La colonización de Sierra Morena fue un proyecto llevado a la práctica por Pablo de Olavide, intendente de Carlos III de España para Andalucía el 2 de abril de 1767 se autorizaba la entrada en España de 6.000 colonos católicos procedentes de Suiza, Alemania y Centroeuropa para poblar Sierra Morena. Carlos III había impulsado esta medida debido a la falta de seguridad de los viajeros que empleaban la carretera general de Andalucía a su paso por Despeñaperros, una región completamente despoblada que era tramo habitual para el bandidaje.

En 1766 el Rey aceptó la propuesta de Johannes Caspar von Thurriegel, un oficial bávaro que se comprometía a traer a España seis mil colonos, la mayoría procedentes de Alemania y Flandes; las únicas condiciones que se les exigía era que fueran católicos, labradores o artesanos y pacíficos ciudadanos. Se les prometía un lote de tierras, utensilios para labranza, unas cabezas de ganado y 326 reales de vellón.

Actualmente, los descendientes de los colonos viven sobre todo en las poblaciones de La Carlota, La Luisiana, Cañada Rosal, La Carolina y otras cercanas, conservando algunos apellidos extranjeros, su fisionomía (cabello claro, ojos azules, etc.) o bien fiestas claramente centroeuropeas.

miércoles, 27 de abril de 2011

Hermanos Pincheira


Hicieron suya la causa realista durante la guerra de Independencia de Chile. Todos fueron hijos de Martín Pincheira.
Los hermanos Antonio, Santos, Pablo y Jose Antonio Pincheira se alzaron contra las tropas patriotas en 1817 y durante 15 años mantuvieron una guerrilla en nombre del rey. Asaltaron, saquearon y robaron mujeres a cambio de recompensa. Sus correrias llegaron hasta Buenos Aires y fueron un problema sin solucion para el gobierno.
Si en un principio la banda la integraron principalmente campesinos, pronto se unieron otros miembros. La persecucion de sospechosos realistas por parte de los patriotas y los infaltables abusos de poder llevaron a muchos a unirse a los rebeldes. Parte de la tropa independentista, "exasperada de la necesidad y falta de sueldo", segun informes de la epoca, fue a dar tambien a sus filas.

De esa forma, el contingente de Los Pincheira crecio y se transformo en una gran fuerza. Los informes hablan de entre 500 y 1000 hombre. En sus huestes tambien entraron bandidos netos, ex presidiarios y una fauna de fugados de la ley. Pero pese a ello, subraya Ana Maria Contador, la banda mantuvo una estructura militar, donde el mas alto rango lo ocuparon siempre los hermanos Pincheira.

Entre 1817 y 1832 asaltaron numerosas veces Chillan, Parral, Linares hasta llegar a Talca, Curico y San Fernando. Durante dos años, y tras una emboscada patriota, se radicaron en Argentina y sus correrias alcanzaron a "Mendoza, San Luis, Cordoba, Santa Fe i Buenos Aires", segun Barros Arana.

Los Pincheira fueron un problema sin solucion para el gobierno. Ademas de los enfrentamientos armados, el Ejercito recurrio a multiples tacticas para destruirlos, desde infiltrar espias para crear intrigas entre los hermanos hasta introducir botellas de alcohol con el virus de la viruela en sus filas. Pero nada lograba resultados.

Hacia 1832 Antonio habia muerto en una batalla y Santos en un accidente en la cordillera, y los Pincheira se mantenian como el ultimo bastion realista de Sudamerica. El gobierno propuso conversar de paz y Jose Antonio accedio. Fatal error; Manuel Bulnes aprovecho la confianza establecida y en una emboscada arraso con ellos. Pablo fue fusilado y Jose Antonio escapo, pero al final se entrego.

Contratado como empleado en la hacienda del presidente Jose Joaquin Prieto, el ultimo de los Pincheira murio anciano, rodeado de hijos y de leyenda

Arizona española

A pesar de que los españoles no tenían ciudades para ellos mismos, a fines del siglo XVII los colonizadores comenzaron a llegar a un ritmo constante a la región, atraídos por el descubrimiento reciente de depósitos de plata alrededor del campo minero de Arizona. La mayoría de los colonos se marcharon después de que Juan Bautista de Anza anunciara que había sido simplemente un tesoro enterrado; sin embargo, muchos se quedaron y se convirtieron en agricultores de subsistencia. A mediados del siglo XVIII, los pioneros de Arizona intentaron expandir su territorio hacia el norte pero los nativos americanos tohono O'odham y apache, quienes habían empezado a asaltar sus pueblos en busca de ganado, se lo impidieron.
En 1765 comenzaron las Reformas Borbónicas con Carlos III de España, realizando una redisposición mayor de los presidios en la frontera norte. Los jesuitas fueron expulsados del área, y los franciscanos tomaron su lugar en las misiones. En las décadas de 1780 y 1790, los españoles desarrollaron un plan de establecimiento de campos de paz apaches para proporcionarles víveres a fin de que no los atacaran, permitiendo a los españoles expandirse hacia el norte.

la política española hacia los apaches
a finales del siglo XVIII, aunque no se logró una total pacificación de
los indios apaches a finales del siglo XVIII
la Apachería, se puede afirmar que se inició un cambio sustancial en las relaciones
con dichos amerindios que permitió una convivencia entre ellos y los
hispanos. En las comarcas de los presidies de El Paso, Janes (Chihuahua),
Fronteras (Sonora) y Tucson (Arizona) se instalaron nutridos campamentos
de apaches que recibieron periodicamente raciones y suministros. Esta política
permitió el desarrollo y expansión de actividades ganaderas, agrícolas y
mineras a lo largo de la frontera de la Nueva España hasta bien entrado el
periodo mexicano después de 1821. Cabe mencionar que esta convivencia
permitió a los apaches estudiar las tácticas militares de les euroamerícanos.
Incluso algunos apaches aprendieron a leer y escribir en castellano, le cual
les permitió interceptar los correos durante las guerras con los mexicanos que
se iniciaren a partir de la tercera década del siglo XIX. Hay que mencionar
que las causas de éstas guerras se hallaban en las dificultades financiaras y
convulsiones políticas de la República de México que no permitieron la continuación
con la política de pacificación de los apaches. Sobre todo el gobierno
mexicano y los estatales de dicho país se encontraron en la imposibilidad
dc continuar suministrando raciones y aperos agrícolas a los apaches.